lunes, 7 de mayo de 2012

Incertidumbre cinematográfica


Con la incertidumbre final de la película nos despedimos. 

El cine, ese ocio de antes, ocio para enamorados. La oscuridad de la sala inhibe los miedos mientras se acrecienta el temor de la película. La protagonista va entrando donde no debe, abriendo la puerta al susto, con el alma en vilo como esos pobres del fondo de la sala que no saben si tocarse o repelerse, asustados del placer del roce de sus manos.

No son nuevos ya. Se conocen en la paciencia de los años, en los errores y en la distancia. Llevan el regusto del fantasma del pasado, pero aprenden a olvidarlo en cada encuentro, a reinventarlo. Atrapados en la rutina de la cama, hoy se han atrevido a dar el salto, y aquí están, supurando pánico en la oscuridad del cine, cual pez fuera del agua aleteando. Reminiscencias del pasado y un poquito de embriaguez. Los fotogramas van pasando y se sienten más seguros, inconscientes del mañana.

Pero la película acaba, oscura y ambigua, con el niño muerto y el final alternativo. Ahora sólo les queda salir de su cruel incertidumbre y dibujar poco a poco su respuesta.

PD. Un placer haber compartido contigo esta experiencia. 


sábado, 5 de mayo de 2012

La España "dominó"


El desplome del Estado español actual es como un dominó; cuando se cae la ficha de la economía, se precipitan el resto de las bases aparentemente inmóviles y eternas, y cuanto más discutimos en como solucionarlo, más rápido llega nuestra propia y total caída. La pregunta es: 
¿Quién ha intentado poner resistencia a este desplome inminente? 
¡Y no digamos que la absoluta culpabilidad es del sistema económico capitalista! 
La respuesta correcta es el orgullo de una nación y el juego de la política actual española. Su actividad fundamental es el defender el bienestar y el espíritu español dentro de nuestras fronteras. Tristemente, esta actividad se ha transformado en el arte del engaño y la distracción, dejándonos ver riñas y debates que no llegan a ninguna parte y dando la imagen de una pelea entre perros y gatos. ¿Cuándo se darán cuenta que los arañazos y las palabras no son compatibles? 
Españoles y españolas, démonos cuenta de la realidad y no nos dejemos engañar por el pausado progreso que nos ofrece el animal político de hoy en día.